Hoy Santiago de Chile, nuevamente amaneció con Pre-emergencia Ambiental, debido a la gran cantidad de material particulado fino y grueso en el aire de una cuenca, que por sus condiciones geográficas, presenta malas condiciones de ventilación.
Es curioso pensar, que a pesar de llevar tantos años dándole vueltas al tema, aún nos cueste entender el real origen de esta situación, tal vez precisamente porque entre tanto humo, nos cuesta vislumbrar el horizonte y aclarar la visión respecto al punto de inicio de esta vorágine densa y espesa que apenas nos deja respirar.
Desde hace muchos años, hemos sido víctimas y victimarios, del consumo indiscriminado de un modelo Egoísta y Autodestructivo, que nos ha convencido que la acumulación material es un logro, que si soy capaz de generar ingresos para renovar el auto cada año, y si puedo tener más de un auto, entonces estoy haciendo bien las cosas, porque he logrado llegar lejos gracias a mi esfuerzo. Ya no importa si las familias no pueden cenar juntas, no importa si el fin de semana los niños no pueden jugar con sus padres, ya da lo mismo incluso que ya no haya donde jugar, porque hemos ampliado nuestras casas y construído muros altos por "seguridad", porque hemos "invertido" en propiedades en edificios en los cuales ni siquiera conocemos a nuestros vecinos, porque hemos logrado, gracias al sacrificio de nuestro trabajo, materializar la compra de un departamento en ese barrio que siempre nos gustó, al que con tantas ganas aspiramos, y ahí donde antes habían 6 autos en una manzana, hoy compartimos el espacio con 200 autos más. Sin embargo, nos escandaliza que "nadie haga nada" por mejorar de manera real la Calidad de Vida de las personas, porque "no me dejan circular en la 4x4 último modelo que adquirí", que ocupa una calzada y media, y las calles siguen del mismo porte.
Así se veía Santiago desde mi bicicleta al mediodía del 18 de junio de 2015. ¿Es esto lo que queremos para el futuro? ¿Es este el legado que queremos dejar a las nuevas sociedades?
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De repente, este modelo de consumo y egoísmo, ya no solo acumula ropa, autos, propiedades, estrés, enfermedades, horas extras o vacaciones; ahora acumula también todo el humo que generamos por mantener ese estándar pseudocómodo que nos inventaron y del cual nos transformamos en esclavos. Las personas no comparten, no se miran ni se saludan, cuando van en un ascensor miran en el techo, cuando caminan por la calle, van en bicicleta y hasta en el gimnasio van con audífonos, conducen solitarios sobre un aparato metálico de 6 metros cuadrados, echando humo y de mal humor, prefieren sumergirse en el whatsapp en vez de conversar, prefieren poner un "like" en redes sociales en vez de correr a dar un abrazo, sin embargo cuando se llega a una situación crítica, nos quejamos porque "nadie hace algo para cambiar".
La solución es mucho más sencilla de lo que podamos creer, pero el paso para ejecutarla es un poco complicado, porque nuestra mente habita en una cuenca con malas condiciones de ventilación, y por lo mismo nos cuesta ver con claridad y entender que si queremos verdaderos cambios, debemos dar diferentes pasos. No sigamos cometiendo los mismos errores, hay muchos errores nuevos que cometer, de los que siempre podemos seguir aprendiendo.
El Desarrollo debe dejar de ser un concepto material medible en índices, debe ser una consecuencia de cuán Felices somos nosotros y nuestro entorno con las decisiones que tomamos, porque no estamos solos, aunque por ahora estamos un poco ciegos porque el humo no nos deja ver bien cuán acompañados estamos.
¡¡Arriba los Pedales y Muy Buenos Días!!